29.12.11

La persona que más debería conocerme sos vos. Y a veces no sé si lo hacés o no, si dejás que tus prejuicios y tu modo de ver las cosas sobrepasen a mis explicaciones. Quizás a veces actúo en formas que no son del todo claras, y a la hora de explicarlas lo son menos todavía. Pero no quita el hecho de que, si yo hago o dejo de hacer algo, es como yo lo estoy viendo, no como vos lo ves desde afuera. Como te dije anoche, somos muy distintos, nunca vas a entenderme ni yo a vos, pero quisiera que entiendas que, desde mi punto de vista, no son las cosas como vos las planteás. Yo te entiendo, en serio, puedo ver qué te jode, pero las proporciones desde mi lado también deberían pesar en nuestros asuntos.
No quiero que todo se vaya al carajo por un tema de comprensión. Tenemos que aceptarnos, tenemos que entendernos desde los límites posibles, pero para hacerlo hay que hablar. Hablar en el momento, hablar cuando estamos juntos, hablar en serio, sin vueltas. Porque si no hablamos, no funciona. Y no hay nada en el mundo que yo quiera más que que ésto funcione.