24.4.14

Tengo un montón de respuestas a preguntas que ni siquiera me hice, tal vez porque me cansa ser escudo y espada y lo único que es real es la ambigüedad de mis palabras. A veces todo lo que quiero es rendirme ante ellas y dejarlas envolver la realidad, aunque ésta no sea más que una rosa y yo me aferre a sus espinas como si no doliesen. Y en el fondo las disfruto, no conozco otra forma de vivir más que con el dolor y su regocijo. Y es que creo que la vida es muy corta para no hacerlo.

17.4.14

No olvido que soy mi propio infierno, no olvido que soy fuego y me quemo. No olvido que soy agua y me apago. Pero tampoco olvido lo que elegí, que el mejor remedio siguen siendo tus brazos alrededor de mi cintura y que no hay mejor promesa que la de tus labios diciéndonos.
Porque no existimos. Porque sí existimos. Porque entre tantos "porque" afirmando excusas nunca nos preguntamos "por qué".
Y yo nos pienso y nos armo en un imaginario en donde la soledad de las pupilas es sólo momentánea hasta que recuerdo que esa es nuestra realidad, y ella más que todo nos asesina como a soldados en este campo de batalla en una guerra que nunca va a terminar.
Y después de todo me abrazo a mis palabras como si realmente no fuesen otro "porque" en donde esconder mis miedos.


100 años después pintó publicar algo.