¿Sabés cuál fue mi problema? Creer en vos.
Sí, tengo que frenar con estos bloggeos tarados, pero es así. No debería haberte dejado enamorarme, arrastrarme, lastimarme, sanarme y hacerlo de vuelta. Pero te dejé, y te dejo. Porque hay
algo en vos que... es algo distinto, algo que me hace quererte de esa forma, verte de esa forma. Pero después viene el momento de abrir los ojos, salir de ese mundo, y todo lo que veo es a mí misma lastimada, y a vos no sé como. ¿Cómo estás vos? ¿Podés vivir día a día sabiendo lo que sabés? ¿Sabiendo lo que siento? Sabiendo que los ojos no mienten, no sé cómo seguís ahí, tan firme. Y yo acá, desmoronándome.